Autonomía de la Iglesia local.
La iglesia Biblica Casa de Dios, es una iglesia autónoma, tenemos:
1. Tenemos Autogobierno
“Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo,”. (Efesios 4:11 – 12).
2. Tenemos Autosostenimiento
“Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendiciones hasta que sobreabunde”. (Malaquías 3:10).
3. Tenemos Autoexpansión
“Por tanto, ID, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo”. (Mateo 28:19 – 20).
Sacerdocio del creyente.
“…Y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre.” Apocalipsis 1:6; “Pero ustedes son pueblo escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo que pertenece a Dios, para que proclamen las virtudes de aquel que los llamó de la oscuridad a su luz maravillosa.” 1 Pedro 2:9
La Biblia nos enseña que cada creyente es llamado para el servicio cristiano de “tiempo completo”, sin importar su vocación. Practicamos la verdad de que cada creyente es un ministro al instar a nuestros miembros a que encuentren un lugar de servicio y ministerio. Cada creyente tiene acceso directo a Dios a través de la oración y la lectura bíblica.
Ofrendas y diezmos.
“Que cada uno dé como propuso en su corazón no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al dador alegre. 2 Corintios 9:7. En nuestra Iglesia, practicamos el ofrendar y diezmar para el sustento del cuerpo de Cristo, la iglesia. Reconocemos que todo le pertenece a Dios, que somos administradores y que parte de nuestra adoración es darle a Dios una parte de lo mucho que nos da, es un privilegio personal.
Bautismo por Inmersión.
“Habiendo sido sepultados con Él en el bautismo, en el cual también habéis resucitado con Él por la fe en la acción del poder de Dios, que le resucitó de entre los muertos.” Colosenses 2:12 (LBLA).
Practicamos el bautismo por imersión en el agua, la manera en que Cristo fue bautizado y la manera que la Biblia manda.
Vivir Guiados del Espíritu.
(Jesús dijo)…”Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, este lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podeis hacer”. Juan 15:15. Creemos que la única manera posible para vivir una vida cristiana es a través del Poder de Dios en nosotros. Procuramos una vida diaria dependiendo de Dios y su Espíritu para ayudarnos a hacer lo que es correcto. Fil. 2:13; Ef. 5:18
Decir a Otros Acerca de Cristo.
“…Y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros”. I Pedro 3:15. Es la responsabilidad de cada Cristiano el compartir las Buenas Nuevas con aquellas personas con quienes Dios nos envia en contacto diariamente el compartir personalmente acerca de Cristo e invitar amigos a la iglesia.
Somos Un Cuerpo – ¡No un Negocio!
Somos un Organismo – ¡No Una Organización!
Somos un Cuerpo, Bien Organizado
Por lo tanto funcionamos en base a: la manifestación de los dones no a la elección de líderes
“Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función. Así nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros.” Romanos 12:4-5
En una organización, el “mantenimiento” se convierte en el enfoque principal, pero en un organismo, el “Ministerio” es el enfoque principal.
En nuestra Iglesia tenemos una estructura simple de manera que podamos aumentar los ministerios y disminuir los comités.
“Él fue quien concedió a unos el ser apóstoles, a otros profetas, a otros evangelistas, y a otros pastores y maestros, a fin de capacitar al pueblo de Dios para la obra de servicio, para que sea edificado el cuerpo de Cristo.” Efesios 4:11-12 (NVI).